¿Por qué no creer?

Desde chico siempre me ha parecido emocionante el mundo que existe mas allá de las estrellas, ¿es mas o menos común o no? supongo que todos hemos fantaseado alguna vez con recorrer el espacio, pisar otro planeta, saludar a un extraterrestre (o huir de el), hace unos días un amigo me envió una columna escrita por el en un blog llamado "Soñator" , esta columna se titulaba "Creencias" (se las recomiendo totalmente) y me hizo pensar....¿No sería maravilloso descubrir que realmente no estamos solos? fuera de todo lo que se dice que nos esconde el gobierno, algunas personas podrán tener miedo, otras, como yo, esperan día con día  el momento en que por fin salga a la luz todo esto y nos enteremos de la verdad, pero por ahora solo nos queda esperar, y mientras esperamos ¿Por qué no fantasear nosotros mismos? somos libres de opinar, somos libres de idear mundos y seres espaciales que alimenten nuestra imaginación, somos libres de desarrollar nuestras propias teorías sin necesariamente sentarnos a escuchar al cafiche de Salfate haciendo un descarado copy paste del artículo de alguien más. si nuestros amigos interestelares existen y deciden algún día visitarnos para destruirnos, para instruirnos o para simplemente astroviolarte y meterte una sonda por el culo podremos sentirnos tranquilos (bueno en realidad yo creo que nadie se sentiría tranquilo después de una astropentración) y a su vez emocionados ¿Si estuvimos tanto tiempo esperando por esto?...¿qué mas habrá? si el universo es tan extenso ¿No sería genial conocer estos mundos? desde su cielo, sus animales hasta sus personas o como sea que se llamen ellos mismos, y si no existiesen, doy por seguro que habrá valido la pena creer, porque le dio un sabor distinto a nuestro mundo, a mi forma de ver el cielo en la noche, o e incluso taparme como una nenita cuando una luz gigantesca cubría mi pieza pensando..."mierda me van abducir" si les sirve para pensar, me gusta imaginar que cuando levantas el cuello para mirar el cielo, alguien en otro planeta levanta la vista a un cielo muy distinto al nuestro, pensando lo mismo que nosotros, y lo creas o no, tal vez te está mirando, a ti justamente, en este momento.